Resumen:
El crecimiento urbano descontrolado ha alterado los flujos de temperatura en las áreas urbanas y periféricas. La presencia de islas de calor afecta la calidad de vida de los habitantes de las zonas urbanas y limita las posibilidades de llevar a cabo diversas actividades.
Está demostrado que la vegetación urbana y los cuerpos de agua contribuyen a regular la variación de la temperatura, amortiguando la presencia de islas de calor y haciendo los lugares más confortables para desarrollar actividad física. De esta manera, la vegetación urbana es un factor clave para mejorar la calidad de vida de los habitantes. Así, el objetivo es identificar la magnitud de las variaciones de radiación solar, y las temperaturas en metrópolis mexicanas y relacionarlas con la presencia de vegetación en las áreas de influencia de éstas.
La metodología comprende el uso de cartografía y de imágenes satelitales para establecer correlaciones espaciales entre la temperatura máxima, anomalía térmica, radiación y la vegetación presente en las ciudades mexicanas.
En los resultados no se encontró una clara correlación entre la presencia de temperaturas máximas y valores más altos de radiación y con la ausencia de vegetación. Existe escasa relación, entre la ausencia de vegetación y la presencia de anomalías térmicas.